Ahora es el momento de redoblar -no de frenar- la transformación de la industria

Por Barbara Frei, Executive Vice-President and Chief Executive Officer, Industrial Automation, Schneider Electric
A lo largo del siglo XX, los libros de ciencia ficción, películas y series de televisión han imaginado cómo sería el futuro. Las historias de robots de Isaac Asimov hablaban del poder de la automatización y el cuento Autofac de Philip K. Dick de 1955 presentaba máquinas autorreplicantes que se apoderaban de una fábrica y llevaban la producción al límite.
La mayoría de estas predicciones de transformación industrial no se han hecho realidad. Pero el último informe World Robotics revela que el uso de nuevos robots industriales está en su punto más alto. Solo en 2021 se instalaron medio millón en fábricas de todo el mundo. Y las redes 5G, el Internet de las Cosas (IoT) y la Inteligencia Artificial (IA) han proporcionado los bloques de construcción para un futuro industrial que se ve muy diferente al presente, por no hablar de 1955.
Centrarse en la transformación industrial y la eficiencia
Los industriales de hoy reconocen que estas tecnologías de la "Industria 4.0" pueden transformar sus operaciones, revolucionar la eficiencia operativa y mejorar su competitividad más allá de la mera productividad.
Pero aplicar este cambio a escala y velocidad sigue siendo un reto. La mayoría de las empresas industriales están experimentando con una variedad de casos de uso, pero todavía tienen que darse cuenta de los beneficios tangibles de las operaciones más inteligentes.
Además, las empresas de todo el mundo se enfrentan actualmente a una incertidumbre sin precedentes. Las secuelas de la pandemia. La situación geopolítica. La crisis energética mundial. La subida de los precios de las materias primas. La oscilación de los costes logísticos. La aceleración del cambio climático. Y la presión cada vez mayor para reducir las emisiones de carbono y el impacto medioambiental. Todo ello ha tenido graves repercusiones en las cadenas de suministro y ha catapultado la resistencia operativa, la agilidad y la sostenibilidad a los primeros puestos de la agenda empresarial.
Liderar una transformación industrial responsable en los centros
Frente a todo esto, algunos líderes de la industria manufacturera están abriendo camino en la transformación industrial, adoptando toda la gama y el potencial de cambio de juego de las tecnologías de la Industria 4.0. Detrás de las puertas de la planta de Schneider Electric en Le Vaudreuil, en el noreste de Francia, por ejemplo, los vehículos sin conductor y los robots colaborativos forman parte del flujo y reflujo diarios de la producción. Le Vaudreuil, reconocida como Faro Avanzado y Faro de Sostenibilidad por el Foro Económico Mundial, es uno de los siete centros de producción reconocidos por ser pioneros en digitalización, eficiencia industrial y sostenibilidad, junto con las fábricas de Johnson & Johnson en Irlanda, Western Digital en China, Unilever en la India y Micron en Singapur. Estos "faros" -como su nombre indica- guían a otros agentes del sector en su intento de superar los retos y aprovechar las oportunidades de la cuarta revolución industrial.
Los datos operativos convergen en el centro de control unificado de Le Vaudreuil para revelar el rendimiento de los activos, la energía y los procesos. Los cuadros de mandos muestran lo que ocurre en cada rincón de los 14.000 metros cuadrados del taller, ofreciendo a los operarios in situ y a los equipos remotos actualizaciones en tiempo real, alertas e información basada en datos sobre la eficacia de la maquinaria y los cuellos de botella o picos de demanda en la línea de producción.
El uso de energía y las emisiones de carbono de Le Vaudreuil se han reducido en un 25% y los residuos de materiales en un 17% desde que comenzó su programa de digitalización en 2018. Además, sus procesos de reciclaje basados en inteligencia artificial ayudan a ahorrar valiosos recursos hídricos.
Llevar la transformación industrial más allá de las instalaciones
Por impresionante que sea todo esto, no estamos ni mucho menos al final del viaje. El siguiente capítulo de la historia de la transformación industrial consiste en aprovechar la potencia de estos sistemas de fabricación digitalizados y aplicarlos no sólo a centros individuales, sino a todas las redes de producción y logística y cadenas de suministro de las organizaciones.